“Me comprometo”, quiere decir, “estar dispuesto a”; también: “mi voluntad está empeñada en lograr lo que me haya propuesto hacer porque tengo fe en ello.”
El poder transformador de un compromiso me hace ser fuerte, sentir vigor y energía por lograr la meta propuesta.
El poder transformador de un compromiso me hace sentir importante, porque me he puesto de acuerdo, me he alineado, “me he calibrado” para algo con alguien; la puesta en común me hace sentir necesitado para algo. Todo esto me hace ser un Agente de Cambio en Acción.
El único camino para el compromiso es la búsqueda del logro de “ese algo”.
El compromiso no tiene plan B.
Estos son los conceptos vertidos por los participantes de la Primera Generación del Diplomado en Procesos Vivenciales de Cambio.”
La Primera Generación de Agentes de Cambios asistió y participó con y en todas las acciones, ejercicios y requisitos del Diplomado en Procesos Vivenciales de Cambio.
Este diplomado los faculta a ejercer un rol especial, el de los Agentes de Cambio en Acción.
Son cinco personas entusiastas que han encontrado una Ruta para Transformar Personas y Organizaciones.
Cuentan con las fórmulas y la magia para convertir y transformar individuos en mejores seres humanos, que logren vivir en un sitio en donde broten nuevas ideas, nuevas formas de producir, fabricar, operar, medir y servir.
Felicidades a esos cinco primeros Agentes de Cambios totalmente formados para tal rol:
Adrián Bucio
Alfredo Dueñez
Maria Esther Aboytia
Luis Alberto Bustamante
René Magaña
Tijuana, B.C. del 2011.
Luis Molina Canales
Autor y Facilitador del Diplomado de PVC.
No hay comentarios:
Publicar un comentario